viernes, 13 de junio de 2008

Capitulo II - Encuentro cercano de todos los tipos


Y hace poco un día de esos de lluvia, que no hay nada que hacer, estaba sentada frente al televisor con el control remoto en mis manos y a mi entera disposición.

Haciendo zapping caigo en INFINITO y veo a Faibo Zerpa hablando de cómo se clasifican los encuentros con los extraterrestres.

Y me pareció una buena idea para contarles como fue mi primera vez con un encuentro cercano con una BATERIA. Obvio con algunas variantes


Encuentro del Primer Tipo (Visual)


Antes de conocer a alguien adicto a las baterías yo había visto ninguna antes. Este encuentro sucedió en una sala de ensayo de mala muerte un sábado a las 2 de la tarde. Después de tomar el tren, y viajar no se cuantas estaciones llegamos a su encuentro.

Entramos y ahí esta ella, imponente toda de color (no me acuerdo) y con no se cuantos platillos

Por supuesto al principio me dio una cosa de respeto, tan grande y con tanto chirimbolo para tocar.

La miré, casi fascinada por el encuentro. Pregunte las típicas cosas que solemos decir

“ Como haces para tocar tantas cosas a la vez” por lo que ellos contestaran

“ Y es difícil pero con estudio y práctica .. “

Después me empecé a interesar en que para que servían las cositas que tenia (pedales, tuerquitas, llaves) porque de alguna manera me hacia recordar al taxi de mi tío,,,,,,,ellos cualquier cosa la compran y la cuelgan

Pero siempre desde afuera como si ponerle una mano encima fuera un pecado imperdonable.


Encuentro del segundo tipo (auditivo)


En un descuido él se iba aproximando a ella, con los palillos en las manos, en cámara lenta, girando las muñecas como para acomodar los huesos, sorteando los obstáculos para poder sentarse en la banqueta.

Se acomodo, miro a su alrededor y vio que todo tenia estaba donde debía estar.

Acto seguido, previo envío de un beso en al aire hacia mi, empezó la frenética historia.

BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh (y repitan esto alternativamente por 5 minutos)(Mi cabeza “¡Que bueno, como toca, es impresionante, espectacular!)

Chincinchinplash (minuto 6, mi cabeza “¿Cuándo termina esto que no entiendo nada?)

Pumpumpum pumplshchintom plac (minuto 8, mi cabeza “ ¿A qué hora me dijo mi vieja tenia que llegar a casa?)

BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh (minuto 8 y medio mi cabeza “ Esto no es música, esto es ruido”

BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh (minuto 9 “¡Por favor que venga alguien para deje de hacer tanto bochinche!”

BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh (minuto 9 y cuarto “POR FAVOR QUE ALGUIEN ME SALVE DE ESTE INFIERNO)

Y al minuto 9 y medio mis suplicas fueron escuchadas desde el mas allá y abrieron la puerta los cómplices de la banda.

“Che loco que bueno estaba eso, hace 5 minutos que llegamos y estábamos afuera escuchando lo que estabas haciendo”

Pensé “Dios estoy perdida estos son peores que él”

Me mira con cara de “que te pareció” y no me quedaba otra, le conteste

“Genial me encanto” (Mentira, mentira mentira, no entendí nada de lo que hiciste).

Allí comenzó una eterna relación.


Encuentro del tercer tipo (táctil)


Fin del ensayo.

Ya mis pensamientos habían recorrido todos los rincones posibles, me había aburrido como nunca. Pero en esa época el solo hecho de estar con él, de acompañarlo valía cualquier cosa.

Y de repente, como en trance, como si una fuerza exterior e indomable, con los ojos extasiados .. vi que la banqueta estaba vacía…

Me levante de la silla, camine lentamente, acomode los huesos de mis muñecas, salve los obstáculos que me separaban de ella, agarre los palillos, me senté, vi todo lo disponible para pegar y manos a la obra. Tan difícil no podia ser

BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh BRBRBRBRBRPUM CRASH TAC BRRBRBRBR TAC TOMshhhh

Solo pasaron no mas de 30 segundos

“Pará, pará, que la vas a romper toda”

“Cuidado con los platos que no se que”

“Con los parches que no se cuanto”

“ Que los palillos no se agarran así”

Salte de la banqueta como disparada por un resorte.

Había osado sentarme sobre su bien mas preciado y encima la había castigado como quien le pega a un bebe.

Su bebe.


Encuentro del cuarto tipo (A cargarla. Un camino de ida)


Y fueron pasando los meses y los ensayos (que ya no me aburrían tanto y hasta me gustaban) la relación se iba afianzando, fui entendiendo un poco mas el arte de tocar la batería.

Hasta podía diferenciar cuando sonaba el bombo o el tambor, o lo que era un Hi Hat o un Ride.

Me asombraba con que facilidad se rompían los palillos o se hacían aserrín o despeluchaban.

El ruido seguía siendo ruido pero ahora lo entendía un poco … solo un poco.

Hasta que un día (por fin) la banda sale de la sala de ensayo para mostrarle al mundo su arte.

Para que contarles los días previos, ensayos, nervios, pero eso me va a dar tela para otro capitulo.

Un Púb., viernes a la noche (como siempre). Había bastante gente, amigos por todos lados y para mi toda una experiencia “era la novia del baterista” de uno de los protagonistas y eso le daba un valor agregado a la noche.

Empezó el show con más de 2 horas de atraso (que no es atraso, es normal)

Salio genial, a la gente que estaba le gusto mucho, aplausos. Aplausos. Aplausos.

Termina y un montón de amigos los saludan, los felicitan, los abrazan (les aclaro que todo esto a mi me encantaba porque sabia el esfuerzo puesto en esto)

Mi mesa se convirtió en un desfile interminable de amigos, conocidos, amigos de los amigos, otros músicos, novias, etc. Éramos como 30 todos contentos festejando

Pero de repente uno a uno fueron despareciendo.

Hasta quedar nosotros dos. ¡Al fin ¡

Charlamos un ratito del show y decidimos irnos.

Pero él en lugar de enfilar para la puerta, sube al escenario y me hace señas para que lo acompañe. Mientras voy subiendo lo veo que empieza a descuartizar la batería.

Primero los platillos y los acomodaba de mayor a menor y los enfundaba.

Les siguió los fierros que sostenían los platillos, los cerraba y los iba poniendo dentro de un bolso enorme para tal fin.

Así le siguieron los pedales y demás boludeces, (hoy se que se llama hardware)

Y ahí quedaba ella toda desnuda, desprovista de “hardware”, indefensa.

Hasta que empezó a sacarle los toms, el tambor, etc. y todo era apilado en fundas al costado del escenario.

Era como un nene con un juego de Lego, que armaba, jugaba y la desarmaba.

Cuando termino con todo me mira con ojos de vaca querendona y me dice…

“Yo voy a buscar el auto, vos anda llevando todo esto hasta la puerta y esperame”

Antes que le pudiera contestar estaba hombreando un par de toms de una mano y la funda de platillos en la otra.

¡Como pesaban los condenados !!!!!!!!!

Después lleve el bombo como pude, y quedaba lo peor el bolso con el fierrerio.

Imposible la tarea de llevarlo de las manijas, Lo fui arrastrando como a un muerto por todo el recorrido del pub.

¿Dónde están todos los amigos, conocidos, etc., que festejaban con nosotros hace media hora?

Indiscutiblemente sabían lo que se venia y por eso desparecieron.

Ahí descubrí que esto era parte del glamour de ser la novia del baterista de banda.

Subió el solito las cosas al auto, yo me senté y me saque los zapatos nuevos de 15 cm que me estrenaba ese día.


Vale la pena contarte algo mas

Segunda sesión de psiquiatría terminada, Gracias Doc

Nos vemos en la próxima




miércoles, 16 de abril de 2008

Capitulo I - ¿Cómo reconocerlos?

Y si pasan sin que te dieras cuenta?
Parecen simples humanos… pero NO!
Son una raza especial
Ni mejores ni peores, rara.
La palabra es RARA

Yo me tope con uno hace algunos años.
Ignoraba, por supuesto, las experiencias insólitas que me tocarían vivir a lo largo del tiempo.
Que les iré contando en distintos capítulos.

Al principio pensé que el ejemplar que tenia en mi poder, era único e irrepetible.
Algo así como la figurita difícil del álbum.
Pero después me di cuenta, era una evolución distinta del Ser humano.
Mi ejemplar no era el único, había cientos de ellos diseminados por el mundo.
Todos unidos por una misma pasión LA BATERIA, o más que una pasión, un estilo de vida.

Con la experiencia adquirida puedo ayudarles a reconocerlos sin que les pregunten a qué se dedican.
Son fáciles de divisar a la distancia.
Solo hay que tener en claro 4 puntos claves

1 - Suelen tamborillear los dedos en forma continua.
En un silencio de la conversación, en medio de una charla, con la taza de café en las manos, cuando crees que están pensando una respuesta inteligente a tu pregunta - ¡NO!- También mueven sus dedos.
Cuando tienen que estar quietos (ej: Cuando nos casamos, frente al cura de la Iglesia, en el video, se puede divisar claramente los deditos moviéndose en su muslo acompañando la Marcha Nupcial mientras yo emocionada, iba camino al altar).
Si están tranquilos, si están nerviosos o los come la ansiedad, mover los dedos es su ley.
En ocasiones pueden cerrar los ojos o mirar para arriba buscando solo sabe Dios que inspiración para seguir tamborilleando. Alguno de ellos ha desarrollado una musculatura que hasta Stallone envidiaría… pero en las falanges de sus dedos.

2 - No escuchan música como cualquier mortal
Escuchan como cualquiera pero no reaccionan como tales.
Sin importar el lugar donde estén, la sala de espera de un médico, manejando, esperando la cena en un resto cool de Las Cañitas. Podrás verlos revoleando brazos a diestra y siniestra. Con los puños cerrados simulando un par de palos imaginarios. Y pateando el piso como si les hubieran robado los pedales y moviendo las cabezas como si recién salieran de Giordano. Perciben sonidos y los identifican con la exactitud tal, al punto de saber de que pulgada y que marca es el platillo suena en una décima de segundo. Lo primero que escuchan es la batería y después de pasarlo MUCHAS veces recién ahí logran escuchar la melodía. De las letras ni hablemos.
También suelen golpearse el pecho con las palmas abiertas, al mejor estilo de Tarzán en medio de la selva tratando de imponerle respeto a una fiera, pero no, están escuchando música y se nota

3 - Tienen un idioma muy particular.
Si tenes la ¿suerte? De encontrar una manada de ellos y te acercas despacio para que no se espanten o simulen ser normales, podrás escuchar frases incomprensibles como:

-CUNCUM PA - CUCUN CUM PA. (y no es que quieren decir Cumparsita y que no les sale).
-TUCU TUCU TA - TUCU TUCU TA (tampoco es que preguntan si el Tucumano esta?).
-TATA MAMA – TATA MAMA (y no están llamando a la madre y al padre al mejor estilo campo).
-PUM TCH – PUM TCH (nunca pude saber que significado extraño tenía, si hasta es difícil escribirlo).
-RATA TA TA TA – RA TA TA TA (no están avisando que “allí hay una rata” obvio).

Todos esos trabalenguas son nada más y nada menos que ritmos hablados
Y no solo han buscado un idioma propio sino que hasta sus matemáticas son un tema especial para ellos.

Hablan de 7/8 y por supuesto nunca es 56. O de 11/8 y al 88 nunca lo nombran. Y es ahí que empiezan a discutir sobre tresillos y quintillos, de acentuaciones como si estuvieran analizando una fórmula de física cuántica, en un laboratorio de la Nasa y de eso dependiera la salvación del planeta de la catástrofe final.
Ni se imaginen que pasa cuando aparece un 21/16. Se pudre todo. En casos muy extremos han tenido que llamar a mediadores para que no llegue a mayores las divergencias por las distintas formas de interpretarlos.
Nunca arriesgues tu vida para comentar 336

Adoran a Dioses de nombres extraños. Abrazan una religión de extrañas costumbres. Sus deidades no son inamovibles. No tienen categoría de intocables ni respetan escalas. Un día puede ser Menganito (no daré nombres reales) y a la semana Sultanito o ambos o tres o cuatro pueden compartir el centro de adoración. Pero eso no quita que sean cambiados por otros en semanas o meses.
Algunos dioses se destacan por innovadores, otros por trayectoria, algunos por su imaginación y así van alternando su lugar de veneración. Pero todos tienen Dioses preferidos. No les rezan ni les cantan Mantras, solo coleccionan sus videos, DVD, notas, CD, partituras, etc. Y hasta llega un momento que ya no tenes lugar donde albergar tanta devoción. Les conocen más las manos y los pies que sus caras

Un día entran corriendo a tu casa con un DVD bajo el brazo, y atropellando al perro, sin saludarnos siquiera, se tiran en palomita sobre el reproductor, suben bien fuerte el volumen de la tele, ponen el disco en su lugar, se apropian del control remoto y en la pantalla aparecen ELLOS (alguno de los elegidos) mostrándoles el camino de la verdad para alcanzar, no la vida eterna, sino mayor velocidad en los pies, las manos, pegarles a los platos con la punta y el culo del palo, cualquiera de esas cosas o mas.

Estas son algunos de los tics de la mayoría de los bateristas.
Quien haya convivido con alguno lo habrá comprobado.
Son así, les juro que no exagero en nada.
Tengo amplia experiencia en el tema.
Ya les contaré mas cosas en el futuro.
No dejen de leerlo

Hacer esta columna es mucho mas barato que el psicoanálisis.

Hasta pronto.
Angelina Cymbals